Sinceramente, tengo una historia bastante aburrida comparada con la de mucha gente. No era un bromista retorcido, no era un tipo que odiaba usar apps de citas. Ni siquiera era alguien con una historia oscura, o algún tipo de deseos o necesidades extrañas para cualquiera que quisiera salir conmigo.
Siempre fui bastante genuino en mi perfil. Solo quería una chica con la que pudiera conectar a nivel emocional. A quien pudiera apoyar y que pudiera apoyarme. De hecho, nunca recibí muchos mensajes porque estoy bastante seguro de que todo el mundo pensaba que yo era aburrido.
No había trucos interesantes, historias o bromas conmigo. Lo que recibías era a mí en estado puro. Un tipo sencillo, que quería una vida sencilla, y que quería a alguien a quien amar más que a nada en el mundo.
Bueno, después de ser fantasma por quincuagésima vez, decidí intentar ligar con una chica más, y déjenme decirles que había oído que los polos opuestos se atraen, pero esta fue la primera vez que realmente lo creí. Sarah era todo lo que yo no era. Era simpática y popular, le encantaba hacer bromas y le encantaban los temas y los trucos. Sinceramente, no podía creer que me estuviera mensajeando con ella.
Me dijo que le encantaba que yo fuera tan real y que hacía tiempo que quería enviarme un mensaje. Tuvimos una cita y el resto es historia. Conocernos fue lo mejor que nos pudo pasar.
